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¿Cuáles son los beneficios de la relación entre hidratación y nutrición?

¿Cuáles son los beneficios de la relación entre hidratación y nutrición?

Seguro oíste o leíste en múltiples ocasiones que la correcta hidratación y nutrición son imprescindibles para el funcionamiento de tu organismo y desarrollo de tus actividades.

Justamente por ello, ambas mantienen un vínculo estrecho, ya que no pueden realizarse por separado; es decir, al comer algo estás casi obligado a beber para digerirlo mejor. Y, a su vez, tampoco podes solamente tomar agua u otros líquidos sin ingerir alimentos.

Concretamente, las dos acciones deben implementarse en simultáneo; es decir, si hacés una, al menos a los pocos minutos te convendrá hacer la otra. La excepción más importante será, por ejemplo, cuando estás corriendo o realizando ejercicio, dado que beberás, pero luego tardarás en comer.

La relación entre hidratación y nutrición, clave para los deportistas

En paralelo a lo último descrito, los runners, atletas y quienes practiquen algún deporte con intensidad deberán tanto hidratarse como nutrirse de manera correcta. En un contexto en el que existen múltiples líquidos y alimentos buenos y malos, llevar adelante una dieta adecuada es clave para el buen rendimiento. Esto se debe al menos a las siguientes cuatro razones:

  • Combinar una buena hidratación y alimentación permite regular el metabolismo y optimizar su rendimiento

  • Recibir los nutrientes necesarios para poder sentir la energía suficiente para una actividad intensa

  • Mantener un peso equilibrado y evitar tanto los excesos de grasas y propiedades dañinas como la escasez de los nutrientes esenciales para el organismo

  • Contar con la cantidad y calidad aconsejada de líquido (aproximadamente dos litros diarios) y de comida (dieta que oscile entre 1500 y 2000 calorías por día)

¿Qué significa una hidratación adecuada?

La relación entre nutrición e hidratación ayuda a lograr lo que se conoce como hidratación adecuada. Esta implica ingerir entre 1.5 y 2 litros de agua cada día de manera uniforme; es decir, no se trata de tomar cinco vasos en un minuto para completar el 50% de la cantidad recomendada y el 50 restante distribuido en 10 horas; debe ser parejo y variar según tu desgaste físico y mental.

En este sentido, recordá que no es igual el líquido que requerirás durante cinco horas en las que estás tranquilo en tu casa que las dos en las que jugás un partido de fútbol bajo el sol.

¿Qué significa una nutrición ideal?

Con la alimentación sucede lo mismo que con el líquido. ¿Por qué? Porque la ingesta de calorías, como así también la cantidad de alimentos, tiene que ser de manera uniforme. A su vez, variará según tu rutina. Sin embargo, el desayuno es siempre imprescindible, al igual que ingerir más calorías durante el almuerzo al mediodía que en la cena a la noche.

Así, la relación entre hidratación y nutrición es muy estrecha, dado que ambas refieren a diferentes productos, pero son complementarias y esenciales para el desenvolvimiento cotidiano. Asimismo, llevar adelante una dieta equilibrada y adecuada según tus necesidades concretas implicará en la gran mayoría de los casos comer y beber en simultáneo.


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