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¿Cuáles son las diferencias entre el agua segura y agua potable?

¿Cuáles son las diferencias entre el agua segura y agua potable?

Agua segura y agua potable parecieran referirse a lo mismo y, de hecho, mantienen un estrecho vínculo ya que ambas comparten características. Sin embargo, poseen también sus diferencias que van desde lo que contienen hasta su cualidad de bebibles. A continuación, te las detallamos.

Cabe destacar que los respectivos nombres ya adelantan de qué se trata. Por un lado, la segura carece de gérmenes o propiedades que puedan dañar el organismo al ser ingerida. Por otro, la potable es la que se encuentra en óptimas condiciones para poder beberse tanto una vez como de forma cotidiana.

Las diferencias más importantes entre el agua segura y agua potable

Primero que nada, la definición de agua segura indica algo que también está presente en la potable. Dispone de una cierta condición y ha recibido un tratamiento que la inhibe de gérmenes y sustancias tóxicas, por lo que se puede beber sin inconvenientes.

Por su parte, el agua potable incorpora otras propiedades que la hacen trascender su condición de segura. Concretamente, sirve no sólo para elaborar alimentos, hacer infusiones y lavar dientes y diferentes objetos, sino también para beber a diario y percibir los efectos de propiedades benéficas como las vitaminas.

Tal es así que, si a una persona le dicen “podés beber el agua de aquí porque es segura”, esta no se siente completamente segura. En cambio, si le aclaran que es potable, ahí sí dicha palabra los convence de que es una decisión correcta.

Almacenar agua, otra acción donde se perciben diferencias

Hacer que una determinada cantidad de agua se vuelva segura y se mantenga allí está al alcance del público. ¿Cómo? Realizando las siguientes acciones:

  • Colocar alrededor de dos litros de lavandina por cada litro de agua y dejarla durante 30 minutos antes de consumirla

  • Almacenar el agua proveniente de pozo u otras fuentes en bidones limpios y con tapa

  • Verificar que en ningún momento se produzcan filtraciones, cambios drásticos de temperatura o incluso que el envase esté sucio

  • Mantenerla alejada de los animales y, en lo posible, del contacto con el suelo

  • Limpiar el recipiente o envase cada vez que cambias el agua, lo cual tenés que hacer de manera regular

En este sentido, convertir el agua en potable podría no estar al alcance de cualquier persona. ¿Por qué? Porque requiere de todo lo siguiente:

  • Haberla captado de fuentes naturales como ríos, lagos o embalses

  • Eliminarle todos los flóculos mediante la acción de la gravedad

  • Pasarla por un filtro especial que quite la totalidad de bacterias y propiedades dañinas

  • Aplicar un tratamiento de coagulación/floculación

¿Cuánta cantidad se puede beber de agua segura y agua potable?

El agua segura reúne las condiciones necesarias para ser bebida por una persona. Sin embargo, el hecho de carecer de ciertas propiedades benéficas como ocurre con la potable le provee mayores limitaciones.

Así, la potable puede consumirse de manera ilimitada. De hecho, se recomienda que sean entre 1.5 y 2 litros diarios. Por su parte, la segura no siempre es recomendable, especialmente para niños y adultos mayores.

En síntesis, el agua segura y agua potable cuentan con importantes similitudes, pero también con algunas diferencias que se manifiestan al momento del consumo


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