La importancia de la hidratación en la actividad física

El deporte y todas las acciones que implican una actividad física están muy recomendadas ya que se ha comprobado que contribuyen al bienestar general. Sin embargo, la hidratación en la actividad física resulta imprescindible.

Además, el hecho de estar exigiéndote requiere de mayor demanda de líquido. Sucede tanto en una maratón como incluso en acciones más tranquilas.
Concretamente, realizar actividades físicas es para el cuerpo un periodo en el que la cantidad de agua que se elimina es muy superior. Si cuando estás quieto en tu casa ya necesitás al menos 1.5 litros diarios, durante la actividad dicho número aumenta ya que hay mayores probabilidades de padecer una deshidratación.

Razones que explican la importancia de la hidratación en la actividad física

Más allá de que para muchos es evidente y hasta beben más líquido durante la actividad física, te mostramos las razones más importantes por las cuales tenés que hacerlo.

• El agua facilita el transporte de nutrientes, vitaminas y todo tipo de propiedades en el organismo. De hecho, en la exigencia física la demanda se incrementa
• Activan las enzimas esenciales que permiten suministrar la energía que necesita el cuerpo tanto para permanecer estable como para poder responder a los esfuerzos que le exigís
• Elimina más fácilmente las toxinas e impurezas que, si bien suelen pasar inadvertidas, durante la actividad física podrían afectar
• Beneficia a los tejidos, articulaciones y músculos, los cuales desempeñan un rol esencial en el deporte
• Ayuda a mantener la temperatura corporal ideal. Esto se debe a que durante el ejercicio hay casi un 75% de la energía empleada que se disipa en forma de calor

¿Cuánta agua se recomienda tomar durante la actividad física?

Esta pregunta carece de una respuesta concreta, ya que la cantidad ideal varía según los siguientes tres factores: tiempo de duración de la actividad, intensidad, nivel de entrenamiento (no es igual el esfuerzo siendo principiante que profesional) y clima (en jornadas calurosas requerís de más líquido).

Así, la recomendación por parte de los expertos es la siguiente:

• Beber aproximadamente 500ml de agua antes de hacer ejercicio. De este modo, llegarás bien hidratado y con el organismo preparado para la alta exigencia
• Entre 100 y 200ml cada 15 o 20 minutos durante la actividad
• Más de 1 litro por cada kg perdido durante el ejercicio

Más allá de la deshidratación y sus graves consecuencias, la simple escasez de agua (o contar con una cantidad insuficiente) también te afectará. ¿Cómo? Por ejemplo, sentirás mayor cansancio y una disminución del rendimiento físico. Ambos suceden casi en simultáneo y está claro que te afectarán de forma considerable, cualquiera sea el ejercicio o deporte que practiques.

La hidratación en la actividad física debe ser siempre prioridad para vos. En caso contrario comenzarás a percibir mayores limitaciones y consecuencias tanto en lo eventual como para el corto y mediano plazo.